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Nubes sobre el Mar

Nubes sobre el Mar
Cuadro pintado por mi hija pequeña

viernes, 7 de junio de 2013

Sueños

Cuando era niña no recordaba nunca mis sueños. Ni siquiera estaba segura de haber soñado. Sin embargo ahora los recuerdo casi todos y a color y con todo detalle, incluso demasiado. Me levanto de la cama con una sensación tan vívida que a veces temo confundir lo que he soñado con lo que realmente me ha ocurrido. Últimamente también mientras estoy dormida tengo mis dudas sobre si es realidad o sueño y eso me agobia bastante. Puede que sea un efecto de las muchas medicinas que tomo a diario, incluidos remedios naturales. Me gusta recordar algo de lo que he soñado, pero tanto y tan vivamente es algo inquietante.

Además ocurre que en mis sueños salen a relucir todos esos sentimientos que precisamente yo pretendo mantener a raya. Los recuerdos que no quiero conservar, las situaciones que me gustaría no haber vivido, las preocupaciones en las que no quiero pensar. Se puede decir que aparece mi lado oscuro con todos los rencores, envidias y frustraciones que creía haber superado. Por eso ya no quiero soñar tanto y menos recordarlo tan bien. Me recuerda que detrás de todas mis buenas intenciones subyace un ser primario que todavía va reivindicando los temas no resueltos que debería haber dejado atrás. El sueño es el refugio del subconsciente.


12 comentarios:

  1. Sí, parece que cuando soñamos "demasiado" y lo recordamos muy vívidamente, no descansamos tan bien como se desearía. Hay temporadas en las que me pasa. Un tip para que no pase eso, es repasar todo lo que pasó en el día, antes de dormir; pero es muy importante no "anaizarlo", no darle vueltas, no detenerse en nada que haya pasado; se trata de nada más pasarlo en la memoria, como una película en "cámara rápida".
    ¡Saludos!

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    1. Duermo muy profundamente pero tal vez no descanso bien. Hoy me he levantado con una película completa de mis sueños. Un beso.

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  2. La segunda parte de tu post, es como si huieras estado hablando de mi vida, sólo que no son sueños, son mis realidades, por suerte, cuando duermo y gracias a las pastillas, lo hago del tirón y a la mañana siguiente no suelo recordar nada....es una ventaja, porque sin los sueños son como la vida....


    Besos, Susana.

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    1. Yo a veces también tomo pastillas, pero me acuerdo igual. Un beso.

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  3. Uf Susana, los dichosos sueños. A veces cuanto más reprimes, más se paga luego en los sueños, todo sale, y los sueños pueden ser la válvula de escape de todo lo no resuelto.
    A temporadas a mí también me ocurre, discuto, tengo peleas terribles y hasta me pego en sueños con otras personas, si puedo lo resuelvo en la vida real, me sale más a cuenta, pero a veces no se puede.
    Besos

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  4. La verdad es que nunca le he dado demasiadas vueltas a lo que sueño ...

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  5. Los temas no cerrados y superados siempre nos acompañan, por eso lo mejor es enfrentarse a los temas e ir superándolos poco a poco. así no se tienen rémoras psicológica.
    Besazo

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    1. Es cierto, pero hay temas que me es imposible cerrar. Un beso.

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  6. No es malo soñar. Lo malo es lo que los sueños nos quieren decir que no es ni mas ni menos que el lenguaje de nuestro inconsciente. Besos
    Ana

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    1. La verdad es que prefiriría que no me dijeran nada. Un beso.

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Espero vuestras opiniones siempre que vengan con educación y respeto.