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Nubes sobre el Mar

Nubes sobre el Mar
Cuadro pintado por mi hija pequeña

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Terapia

Para sanar las heridas a veces no queda más remedio que destaparlas. A veces parece que han cicatrizado pero por dentro siguen sangrando aunque queramos evitarlo. Por eso voy a escribir sobre lo que siento, a ver si así consigo un poco de paz de espíritu.

Uno es hijo de su historia por más que quieras olvidarla o creas incluso que lo has logrado. Yo fui una hija inesperada con mis padres ya mayores y cuatro hermanos más. De modo que recuerdo haberme sentido siempre un poco de más. No sé a qué se dedicaba mi hermana, pero yo estaba siempre sola tratando de entretenerme por mi cuenta. Cuando aprendí a leer aquello fue un gran descubrimiento que me salvó la vida en cierto modo. Sólo tuve un par de amigas en la infancia que me duraron poco y me pasaba las horas leyendo y releyendo una y otra vez los mismos viejos libros en el sofá. Sin ellos creo que me hubiera vuelto loca. Me sentía como una hija única.

Mi rutina se reducía a eso, ir al colegio donde me sentía aislada porque era muy tímida, y de vez en cuando salir con mis padres al cine o de excursión. Así transcurrieron al menos quince años de mi vida. A pesar de vivir en una casa llena de gente yo apenas me relacionaba más que con mi perro. Le quería muchísimo, era como un hermano para mí. No sé qué o quién,  tuvo la culpa de que yo tuviera una infancia tan vacía, si es que hubo algo, pero ya da lo mismo. Lo importante es que la relación con mi familia quedó resentida para siempre y que lamento profundamente haber perdido tantos años encerrada en mi propio mundo, pero nunca vi otra salida.

17 comentarios:

  1. Nada más triste que un niño triste. Afortunadamente, crecer es la oportunidad para crear salidas :)
    Un abrazo, Susana.

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    1. Pero para un niño todo parece normal y no se te ocurre que pueda no serlo. Un beso.

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  2. Puede ser que pasara como cuentas y verdaderamente te sintieras sola porque te aislaran, pero también puede ser que tu percepción sea otra y realmente fueras tú la que poco a poco te sintieras mejor contigo misma que acompañada y de ahí que crecieras.... un poco en soledad.

    De todas formas, cuando ya se tienen los años suficientes para darnos cuenta de que nos hubiera gustado vivir de otra forma, es cuando, precisamente tenemos en nuestras manos el hacer lo posible para cambiar eso.... Si eso no se consigue, probablemente haya un problema de fondo que necesite apoyo externo.

    No quiero que pienses que hablo y me comporto como una sabelotodo sin idea, lo único que te puedo decir es que he pasado por eso en mi niñez por un motivo demostrado y después en la adolescencia y en la edad adulta me dejé llevar por lo mismo hasta que, cuando me di cuenta, decidí cambiar radicalmente mi forma de vivir la vida.

    Si todo va bien ahora, es que has sabido cambiar a tiempo.

    Besos.

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  3. Cuando yo empiezo a recordar mis hermanos ya no paraban en casa. No es extraño que nunca hayamos tenido una relación cercana. Después de casarse intenté que pudiéramos visitarnos en nuestras respectivas casas pero no resultó tampoco. Ya a estas alturas el mal está hecho. Somos poco más que conocidos íntimos. Ya te digo que no puedo asegurar de quién fue la culpa si es que alguien la tuvo. Un beso.

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    1. De todas maneras, lo normal sería que hubiera tenido más relación con mi hermana, pero eso sí te lo puedo asegurar, que ella nunca tuvo el más mínimo interés en tenerla.

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  4. Soy de la misma opinión que Yeste. Además, buscar responsables a estas alturas creo que no merece la pena.
    Ahora como adulta puedes intentar sola ó con ayuda buscar una solución.
    Besazo

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    1. No se trata de buscar culpables. Sólo me lamento del tiempo perdido que nunca volverá. Un beso.

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  5. No quiero parecer insensible Susana, y tal vez lo sea y no pueda comprender lo que te ocurre, pero pienso que le das demasiadas vueltas siempre a lo mismo. El pasado es pasado, no podemos hacer nada por cambiarlo. Veo carencias, eso marca, lo sé, pero tienes tu propia familia, tu marido, tus hijos aunque te quejes a veces de ellos, a los demás que les den ¿para qué seguir sufriendo o pensando en lo que pudo haber sido y no fue?
    Besitos, espero no te molesten mis palabras, van con cariño

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    1. Es cierto que sufro pero intentar comprenderlo también me ayuda a soportar las carencias familiares que aún tengo. Un beso.

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  6. Antes de comentar tu entrada quería agradecer tu capote. Caridad de la buena. Gracias, Susana.

    Respecto de lo que cuentas, me recuerda a un post que he escrito hace poco. Creo que en la base de toda terapia primero hay que "sacar fuera", "compartir". Es una buena manera de aliviar el peso y la tristeza. Igual digo una tontería... ¿Lo has hablado con ellos? ¿Alguna vez les has contado cómo te sentiste? ¿O sería peor el remedio que la enfermedad?

    Mucho ánimo con la terapia. Ojalá se alivien las heridas.
    Un beso.

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    1. Como bien dices, contarlo es un ligero alivio. Sin embargo, creo que no serviría de nada hablarlo con ellos. No eran conscientes de lo que yo pasaba. Un beso.

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  7. No se si servirá de mucho que des vueltas al asunto, ya que muchas veces lo que recordamos no es exactamente lo que pasó. Incluso aunque pudiéramos saber exactamente el por qué de lo que nos pasó o lo que sentimos o en qué nos convertimos... ¿merece la pena?. Si te hace bien, por supuesto, pero si solo sirve para darte pena, yo diría que es mejor dejarlo estar. Lo importante es cómo eres ahora y qué haces con tu vida ahora. Lo pasado, pasado está. Supón que simplemente tu personalidad y la de tus hermanos era tan distinta que os separasteis. Si en el cole también eras así, podría ser que eres tú la que prefieres la soledad. Es un suponer, porque obviamente no conozco nada de lo que pasó.
    En definitiva Susana, mi humilde consejo es que no te mortifiques recordando cosas que no te aporten ni te hagan feliz, y que te centres en la vida maravillosa que tienes ahora por delante.
    Un beso

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    1. Yo era tímida, pero eso no hubiera sido motivo para no relacionarme con mi propia familia si no fuera porque cada uno iba a lo suyo y me sentía ignorada, como un cero a la izquierda, invisible. Me sirve de terapia. Afortunadamente nadie me puede arrebatar los siguientes veintisiete años de mi vida. Un beso.

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  8. A MI ME PASÓ LO MISMO PORQUE SOY HIJA UNICA, SIEMPRE AFERRADA A LOS LIBROS, A LA ESCRITURA, A MIS GATOS... ESO SI SIEMPRE TUVE MUCHAS AMIGAS, PERO ME SENTÍ SOLA CON ESA SOLEDAD DE ADENTRO... ESA QUE SE SIENTE AUN RODEADA DE UNA MULTITUD. HOY EN DÍA LA SIENTO Y LA SENTIRÉ HASTA EL FIN PORQUE ES LA FALTA DE AFECTO, TUVE CARIÑO PERO NO ME ALCANZÓ.

    BESOS

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    1. Tienes razón. Es falta de afecto, de atención, de interés. En cierto modo me resarcí más tarde pero esos años de soledad no se pueden borrar. Un beso.

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  9. Hola Susana. Encantada de conocerte. Me gusta tu blog, me gusta lo que leo..... y trataré de conocerte algo más a través de esta biografía por capítulos.

    Un beso

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Espero vuestras opiniones siempre que vengan con educación y respeto.