Echando la vista atrás a veces parece que lo que has vivido es irreal. Ahora que está mi hija menor con tos, me estaba acordando de los años que nos hemos pasado oyendo a mis hijos toser día y noche sin parar. Los tres han tenido asma o manifestaciones parecidas, como laringitis. En incontables ocasiones ha tenido que salir mi marido en plena noche a llevarlos al hospital para que les pusieran una mascarilla, aunque tampoco servía para mucho. Al final compramos la máquina y la tenemos en casa, y me temo que se la voy a tener que poner a mi hija como siga así. No sé si tiene ahora alergia o catarro, pero para el caso es lo mismo. Ya me lo conozco. Han pasado cinco neumonías.
Nadie que no lo haya vivido, se imagina lo que es levantarse noche tras noche, varias veces, durante meses, para darle una cucharada de jarabe a mi hija mayor porque si no, no nos dejaba dormir a ninguno. Resulta increíble pensar cómo mi hijo era capaz de toser sin descanso diez o doce horas seguidas, porque precisamente no paraba hasta que se dormía. En cuanto a la pequeña, las bronquitis le hacían vomitar y no sé cuántas camas habremos cambiado. Lo soportamos porque no nos quedó otro remedio, pero si ahora tuviera que volver a pasar por eso no sé ya si tendría fuerzas. Hay que ver lo que se puede llegar a soportar por los hijos.
No es lo mismo criar un hijo relativamente sano que uno enfermizo, o tres. Creo que debería dar más puntos.:)
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ResponderEliminar¡Claro que seguirías teniendo fuerzas, Susana!, te lo digo yo, que no han sido bronquitis o neumonías pero sí enfermedades graves en dos de las tres que tengo. Siempre tendrás fuerzas para tus hijos, porque ellos son los que nos dan fuerzas a nosotras para seguir viviendo.
¡Adelante siempre, Susana!
Qué bonito: "Siempre tendrás fuerzas para tus hijos, porque ellos son los que nos dan fuerzas a nosotras para seguir viviendo".
EliminarMi pequeña también tuvo una enfermedad grave y el mayor está operado de apendicitis. De todas maneras me alegro de haberlo pasado cuando era más joven. Un beso.
ResponderEliminarClaro, mejor que haya sido con la fuerza de la juventud :)
EliminarEs que la naturaleza es muy sabia y por eso los hijos los tienes de joven, porque si tuvieramos que hacerlo ahora, los míos por lo menos, morian como chinches :P
ResponderEliminarBesazo
Los míos también. Un beso.
ResponderEliminarDice el refrán "Que Dios no me mande lo que pueda soportar". Con las enfermedades de los hijos se aguanta lo que sea. Besos
ResponderEliminarAna
Qué remedio te queda... Un beso.
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