Tengo un gatito muy especial. Resulta que juega con unos ratones de peluche y me los trae para que se los tire, cosa que nunca conseguí con mi perro. Además lo ha aprendido sólo, nadie se lo ha enseñado. También nos sigue por la casa. Viene a la puerta a recibirnos y mueve el rabito como un perro cuando está contento. Así que tenemos las ventajas de un gato y las de un perro. No nos podemos quejar. Cuando le cuento a alguien las cosa que hace mi gato, no se lo pueden creer. Dicen que los gatos son ariscos y no hacen caso a nadie. Será si tampoco les hacen caso a ellos. Nosotros le hemos acostumbrado a estar siempre pendientes de él y hablarle mucho, y él responde a nuestra atención. Desde que tenemos gato, no nos aburrimos nunca.
Es cierto que también nos muerde y nos araña, porque es su manera de jugar, pero generalmente no nos hace daño. Quien quiera tener un gato tiene que contar con ello; con que no es tan doméstico como un perro. Cuando se enfada porque no quiere que lo cojamos se defiende. Por eso, solemos poner la manga del jersey por medio. No sé qué haremos en verano. También es muy tierno cuando se acurruca contra nosotros o sus peluches. Su ronroneo es uno de los sonidos más relajantes que existen. Naturalmente, quien tiene un gato en el jardín, que va y viene, no suele lograr una relación tan íntima con él. Tal vez porque no sale de casa, nuestro gatito es tan amistoso y juguetón como un perro, pero tan tranquilo y limpio como cualquier gato. Vamos, que estamos encantados con él.
Es cierto. Nosotros no podemos discutir delante del gato porque se nota que se disgusta. Sienten mucho. Un beso.
ResponderEliminarTengo dos gatos y los adoro. Es cierto que me encantan los gatos así que no me cuesta nada.
ResponderEliminarMe regalan momentos preciosos y situaciones realmente divertidas.
Un beso.
Es que un gato incluso cuando duerme da para hablar, porque ponen unas posturas graciosísimas. Un beso.
ResponderEliminarYo sé que acabaré teniendo gato...y espero que sea un gato.perro también. En verdad yo querría tener un perro grande....pero Madrid y mi casa no serían lo ideal para él Un besote Susana
ResponderEliminarPersonalmente no me hacen mucha gracia los gatos.
ResponderEliminarPrefiero los perros.
No sé porqué.
Besos.
Winnie. Un gato es mucho más cómodo para una casa de ciudad.
ResponderEliminarToro salvaje. Yo no sabía lo que era tener un gato hasta que lo adopté. Sólo había tenido perro.
Besos.
¡Bien! tambien soy de gatos. Son menos necesitados de atención que un perro.
ResponderEliminarLos gatos se cuidan solos. Un beso.
ResponderEliminarHe disfrutado mucho esta entrada Susana! Te cuento que nuestro gatito Simón de 7 meses es tal cual describes al tuyo! Se comporta como un perrito a la hora de jugar con mi hijo, sale corriendo detrás de la pelota y vuelve donde él está jaja Bueno yo adoro a los gatos, son tan especiales, hay que saber cuidarlos y darles cariño porque ellos son inteligentes y saben muy bien cuando se les quiere y cuando no. Abrazos gatunos para ti! jeje
ResponderEliminarEs cierto. Los gatos detectan los sentimientos. Un beso.
ResponderEliminarQue maravilloso tener un gato perro, así tienes lo mejor de los dos. Besitos y que lo disfrutes muchos años
ResponderEliminarAna
Gracias. Dios lo quiera. Un beso.
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