Hoy es jueves. Tengo gimnasia por la mañana e inglés por la tarde. Mi marido está de viaje. La semana pasada me salté las dos clases del jueves porque no me encontraba bien. Ahora también podría buscar excusas factibles para no ir. Por ejemplo, que tengo que hacer la compra y hacer la comida, y poner una lavadora. Pero si no voy me sentiré culpable por no haber ido. Estando sola en casa es fácil saltarse las obligaciones. Por eso tengo que hacer un esfuerzo titánico para mantenerme firme conmigo misma, que es lo más difícil. Creo que cada día me cuesta más este esfuerzo de voluntad continuo.
Y yo que quería dejar las pastillas de la depresión... No es que me sienta mal pero todo el tiempo tengo ganas de irme a la cama y meterme bajo el edredón. No hay cosa que me atraiga más. Es una pequeña gran tentación que me persigue. Afortunadamente, el gato no me deja acostarme entre horas. Viene y se me sube encima. Es bueno que tenga un guardián tan cumplidor. Así que aquí sigo dándole vueltas a que no debo buscar excusas aunque las tenga. Luego voy a clase y la verdad es que me gusta y salgo contenta. Entonces me repito que he sido una tonta al querer escaquearme, pero es superior a mí.
A veces hay que obligarse un poco a hacer las cosas. Y si te hace bien, pues con más razón tienes que ir a por ello. Un besote!!!
ResponderEliminarMe obligo pero soy un poco blanda.:) Un beso.
EliminarAnimo Susana, no busques más excusas, si luego te gusta y sales contenta, venga ánimo.
ResponderEliminarBesines
Si estuviera aquí mi hija mayor, ella sí que me presiona para que vaya. Un beso.
Eliminar¡Bendito sea el gato! :D Creo que te comprendo totalmente, Susana. Yo soy así de "blanda" conmigo, y me cuesta muchas veces ponerme en acción. También he atestiguado el grado en que puede atrapar la cama, a alguien con depresión. Qué bueno que tu hija te anime para que vayas a las clases. Cada vez que lo logres, date un premiecillo ;)
ResponderEliminarEntre mi hija y el gato me tienen a raya. :). Tampoco puedo tomar muchos premios, que estoy por encima de mi peso ideal. Un beso.
EliminarA mí también me ocurre, la pereza de hacer algo que sé que sin embargo me gusta y luego me alegro de hacer. Supongo que es cuestión de imponerse la rutina e integrarla en nuestro quehacer, lo malo es ir un día, dos no, tres sí...al no coger rutina se termina dejando.
ResponderEliminarBesos
Es cierto, si no vas seguido lo acabas dejando. Un beso.
EliminarLe pasa a todo el mundo, el lado comodo es la mas grande de las tentaciones, pero la verdad es que si hicieramos caso al lado obscuro de la fuerza, terminariamos estancados echandole la culpa a la mala suerte por no tener oportunidades...
ResponderEliminarLes pasa pero no hasta este punto. Un saludo.
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